Un ex militar venezolano con estrechos lazos con el difunto presidente de izquierda Hugo Chávez fue condenado el lunes en Estados Unidos a 21 años y dos tercios de prisión por suministrar armas al grupo guerrillero Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Clíver Alcalá, de 62 años, se declaró culpable en junio de dos cargos de apoyo material a un grupo terrorista y trasferencia ilícita de armas de fuego. Las FARC, consideradas por Estados Unidos como un grupo terrorista, se disolvieron en 2016 como parte de un acuerdo de paz con el gobierno de Colombia.
El juez de distrito Alvin Hellerstein dictó la sentencia en una audiencia en el tribunal federal de Manhattan.
Alcalá es el primero de cinco coacusados del actual presidente venezolano, Nicolás Maduro, acusado de «narcoterrorismo» en 2020.
Los fiscales federales habían pedido una sentencia de 30 años para Alcalá.
Sostuvieron que, además de proveer armas de grado militar a las FARC, Alcalá recibió millones en sobornos por proteger los envíos de cocaína del grupo de la intervención del ejército venezolano.
Los abogados de la defensa pidieron a Hellerstein que sentencie a Alcalá, detenido en Nueva York desde su extradición de Colombia en 2020, a no más de seis años.
Argumentaron que Alcalá estaba bajo la dirección de Chávez cuando ayudó a las FARC y negaron cualquier participación en el narcotráfico.
Inicialmente, Alcalá fue acusado de conspirar con el grupo rebelde para transportar cocaína, pero no admitió cargos relacionados con drogas como parte de su acuerdo final.
Los abogados de Alcalá pidieron a Hellerstein que considere la ruptura del ex general con el gobierno de Maduro en 2013 y su participación, desde Colombia, en un intento infructuoso de derrocar a Maduro en 2020.
Los fiscales argumentaron que las acciones de Alcalá desde 2013 no justificaban la clemencia.
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