Este lunes, 7 de octubre, se cumple un año desde que estalló el conflicto entre las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) y Hamás, tras un ataque sorpresa de las Brigadas Al Qassam, la rama militar de Hamás, al que Israel respondió con ofensivas en Gaza y en el sur del Líbano contra Hezbolá. El conflicto ha dejado un saldo devastador en vidas humanas y en la infraestructura de los territorios atacados.
Víctimas y daños
Durante el primer ataque de Hamás en Israel el 7 de octubre de 2023, 1.200 personas fueron asesinadas y 251 fueron tomadas como rehenes. Actualmente, se estima que al menos 66 rehenes siguen con vida, mientras que 35 han muerto. En Gaza, según el Ministerio de Salud, han muerto más de 41.900 palestinos, la mayoría mujeres y niños, y se reportan más de 97.000 heridos. Además, más de 10.000 personas siguen desaparecidas.
En el Líbano, tras una serie de ataques israelíes, se reportan más de 1.600 muertos y unos 4.000 heridos. El conflicto también ha desplazado a alrededor de 1,9 millones de palestinos en Gaza y a más de un millón de personas en el Líbano.
Estadísticas militares
Israel afirma haber matado a unos 17.000 combatientes de Hamás y a 800 miembros de Hezbolá. Las FDI han atacado más de 40.000 objetivos en Gaza y 11.000 en el Líbano. En respuesta, Israel ha sido blanco de más de 26.000 proyectiles desde Gaza, el Líbano, Siria, Yemen e Irán.
Por su parte, Israel ha registrado 728 bajas en sus fuerzas militares, con más de 4.500 heridos, en su mayoría durante las ofensivas en Gaza.
Catástrofe humanitaria
El conflicto ha causado una grave crisis humanitaria en Gaza, con el 66% de las edificaciones destruidas o dañadas, el 92% de las carreteras principales afectadas, y graves daños en el sistema de salud y la red de agua y saneamiento. Más de 60.000 metros cúbicos de aguas residuales fluyen diariamente al mar, contaminando la región.
Reacciones internacionales
Las acciones de Israel han sido condenadas por varios líderes mundiales, calificándolas de «genocidio». Los presidentes de Colombia, Gustavo Petro, y de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, han rechazado las ofensivas, criticando la falta de acción internacional para detener la violencia. A pesar de estas críticas, Estados Unidos sigue apoyando militarmente a Israel, habiendo aprobado recientemente un paquete de ayuda de 8.700 millones de dólares.
El conflicto entre Israel y Hamás continúa, dejando tras de sí un rastro de destrucción y un futuro incierto para la región.
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