El presidente de Datanálisis, Luis Vicente León, indicó que las encuestas en Venezuela han determinado que 8 de cada 10 venezolanos quieren un cambio político, traducido en un 70% de personas que se oponen a lo que ocurre en cuanto la situación política y económica nacional.
«En el año 2019, casi el 50% de la población creía que se podía generar un cambio político, y ese número actualmente es el 7%, es decir, el 93% de los venezolanos no creen que se pueda producir, por lo que perdieron la esperanza», aseguró.
En entrevista a Kicosis transmitido por Globovisión, el especialista sostuvo que la oposición debe de tener un rol inteligente para conectarse con la población y poder nuevamente construir la esperanza y liderazgo perdido.
«Eso fue lo que rompieron, porque se quedaron con un apoyo internacional y abandonaron el trabajo interno, pensaron que el discurso, la peleadera y el dinero que venía de afuera iba a sustituir la labor interna, cosa que no sucedió», agregó.
Añadió que la pérdida de la esperanza separó a la sociedad del debate político, «así se estén diciendo cosas importantes, la gente no está escuchando porque hay un cortocircuito entre la política y la sociedad. No obstante, los líderes han entendido este proceso y han sabido cómo romper con este problema, manejando un mensaje distinto al convencional».
No obstante, León indicó que existen líderes que han evolucionado y ahora están dirigidos a solventar la problemática de la sociedad, «tu vas a ver a Manuel Rosales, Henrique Capriles y Henri Falcón en una línea moderada, y que reciben un respaldo de una población de personas que quieren negociación, apertura y solución de problemas».
Por otro lado, comparó estas acciones con la postura tomada por la dirigente opositora María Corina Machado y la catalogó como «una mujer desesperada porque nada le funcionó», pero que aún así «cuenta con el apoyo de una población importante, que aunque no es mayoría, si se enfrenta a unos moderados fracturados, se puede convertir en la primera opción».
Subrayó que una parte mayoritaria de la oposición está a favor de permitir un proceso negociador que, a su criterio, abra paso a una nueva inserción en el proceso electoral y en el mundo.
El experto saludó que la oposición, «con muy contadas excepciones», maneje un discurso de integración, apertura a la negociación y de introducir a Venezuela en el mercado internacional.
Aseguró que ese discurso debe ir «dirigido al rescate de la industria petrolera, para que no se queden los recursos en el exterior». Recalcó que mientras hay personas pasando trabajo, hay bienes en otros países que corresponden a Venezuela y dijo que estos «más bien se usen para resolver las situaciones de la gente».
Al respecto, expresó que está de acuerdo en las negociaciones políticas entre Gobierno y oposición, pero que estas se deben dar en Venezuela en función de los intereses nacionales, «no hay nadie que pueda definir desde afuera cuáles son los lineamientos de ese proceso, y pienso que eso es lo que quiere el país», agregó.
Acerca de la realización de las primarias, aseveró que es el mejor mecanismo disponible para buscar una unificación. «Si se logra una oposición que comprenda un actor político que genere de nuevo esperanza, Maduro tendría unos gravísimos problemas electorales, pero como no existen estos factores, se siente cómodo así».
