El Gobierno de Venezuela emitió una contundente respuesta a las críticas realizadas por la Unión Europea (UE) en relación a la inhabilitación de la opositora María Corina Machado para ejercer cargos públicos de elección popular.
El alto representante para Asuntos Exteriores de la UE, Josep Borrell, había expresado su preocupación por esta sanción, considerándola una amenaza para la democracia y el Estado de Derecho en Venezuela.
En un comunicado oficial, el Gobierno de Nicolás Maduro desestimó las declaraciones de Borrell, calificándolas de «injerencismo» en asuntos internos del país.
Enérgicamente, el Gobierno venezolano rechazó cualquier tipo de tutela por parte de potencias extranjeras o grupos de países alineados, subrayando su independencia y soberanía.
«Venezuela no acepta tutela de ninguna potencia o grupo de países alineados con reminiscencias imperiales», afirmó el comunicado.
Además, se les recordó a los representantes de la UE que la legalidad y legitimidad del proceso electoral venezolano no depende ni dependerá de ninguna injerencia externa.
Asimismo, se exigió a los Veintisiete, en representación de la UE, que se abstengan de emitir declaraciones injerencistas y se preserve un relacionamiento recíproco respetuoso.
La inhabilitación de María Corina Machado, que le impide ejercer cargos públicos de elección popular durante 15 años, fue realizada por la Contraloría General de la República.
Esta decisión se tomó tras una investigación patrimonial que reveló errores y omisiones en las declaraciones juradas de bienes presentadas por Machado durante una auditoría.
A pesar de esta sanción, Machado se presentará en las primarias organizadas por la principal coalición opositora el próximo 22
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