Bajo la consigna «Libertad, libertad», manifestantes se congregaron en Caracas este miércoles exigiendo la liberación de los denominados «presos políticos» y el cierre de lo que consideran «centros de tortura» en Venezuela.
«El dolor de la familia no puede ser canjeable ni negociable», afirmó Yorbelis Oropeza, esposa de Alcides Bracho, un sindicalista detenido desde 2022, mientras conserva la esperanza de liberaciones tras las negociaciones entre el gobierno del presidente Nicolás Maduro y la oposición.
Alcides Bracho fue arrestado junto con otros cinco sindicalistas en julio de 2022, en medio de manifestaciones que exigían aumentos salariales y mejoras en las condiciones laborales del sector público. Todos fueron condenados a 16 años de prisión por «conspiración» y «asociación para delinquir».
Los manifestantes portaban pancartas con los nombres de detenidos y los días que llevan en prisión, así como mensajes que instaban al cierre de los centros de tortura y destacaban que «la libertad no tiene un número».
«Le exijo a Maduro que cumpla con la palabra que en Barbados empeñó al decir que iba a una negociación», expresó Oropeza en referencia al proceso de negociación reactivado en Barbados en octubre, que ha llevado a dos eventos de liberación de presos políticos, militares y civiles.
Tomás Guanipa, miembro de la delegación negociadora de la oposición con el gobierno, enfatizó que el objetivo principal de los acuerdos no es solo tener elecciones libres, sino que todos los que están presos puedan recuperar su libertad y que nunca más se persiga a nadie por pensar distinto.
Guanipa subrayó que la lucha es para evitar que exista una puerta giratoria donde unos salgan y otros entren.
A pesar de las promesas y las listas que se mencionan, los familiares de los presos políticos expresan su agotamiento emocional debido a la incertidumbre en torno a la liberación de sus seres queridos.
La asociación civil Foro Penal, dedicada a la protección legal de los presos políticos y los derechos humanos en Venezuela, estima que actualmente hay 270 personas encarceladas por razones políticas en el país.
La protesta en Caracas se suma a los esfuerzos continuos de los ciudadanos y grupos de derechos humanos para presionar por la liberación de los presos políticos en Venezuel
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