El ministro de Energía Eléctrica de Venezuela, Néstor Reverol, anunció la reactivación de un complejo hidroeléctrico en el estado Barinas, lo que representa la incorporación de 120 megavatios para esta región, así como para Apure y los estados andinos de Mérida, Táchira y Trujillo.
Reverol destacó que el Complejo Hidroeléctrico General José Antonio Páez fue puesto en funcionamiento gracias al esfuerzo del personal de Corpoelec, quienes lograron reactivar dos turbinas que contribuirán con la generación de energía para el suroccidente del país.
La reactivación del complejo se logró luego de un arduo trabajo que duró 60 días, durante los cuales se realizaron labores para despejar más de un millón de metros cúbicos de sedimentos del embalse.
A pesar de este anuncio, los ciudadanos venezolanos continúan reportando cortes eléctricos diarios a través de las redes sociales, muchos de los cuales pueden prolongarse por varias horas. Estas interrupciones en el suministro eléctrico son desestimadas por las autoridades como sabotajes al sistema eléctrico, mientras que los ciudadanos exigen soluciones inmediatas.
Según estimaciones extraoficiales, Venezuela experimenta cerca de 200 cortes eléctricos por día, lo que ha generado una constante ola de protestas en todo el país, documentadas por el Observatorio Venezolano de Conflictividad Social (OVCS). Organizaciones como Provea han catalogado esta situación como una «emergencia» y han instado a no normalizarla.
En su informe anual, el OVCS resaltó que los reclamos por la interrupción del suministro eléctrico son continuos y que los ciudadanos denuncian a diario las consecuencias negativas, como la interrupción de actividades y el deterioro de equipos electrodomésticos.
