El fuerte terremoto que afectó a Taiwán, el más potente en 25 años, ha dejado al menos nueve víctimas mortales y más de 800 heridos. Además, ha provocado el derrumbe de edificios, cortes de energía y deslizamientos de tierra. Más de un centenar de personas continúan atrapadas bajo los escombros cerca del epicentro, en el este de la isla. Al principio del temblor, se emitieron alertas de tsunami en el sur de Japón y en Filipinas.
El sismo de magnitud 7.4, seguido por al menos 76 réplicas, tuvo lugar temprano en la mañana del miércoles, a las afueras de la costa este, a 25 km al sur de Hualien, un condado turístico donde residen aproximadamente 100.000 personas, y a 138 km de la capital, Taipei.
Los videos publicados en los medios locales muestran el colapso de varios edificios. En el Parque Nacional Taroko, en Hualien, tres excursionistas fallecieron por desprendimientos de rocas, mientras que un camionero perdió la vida al quedar aplastado por escombros cerca de un túnel.
En Taroko, más de 40 personas resultaron heridas. Las autoridades informaron que habían perdido contacto con 50 turistas que viajaban en cuatro minibuses hacia un hotel dentro del parque.
Los equipos de rescate lograron rescatar a nueve personas de un edificio de ocho pisos que se derrumbó, pero aún hay cinco personas atrapadas. El ejército trabaja junto a los rescatistas para alcanzar las zonas más afectadas. El terremoto, que ocurrió a una profundidad de 15.5 km, golpeó fuertemente una región montañosa, famosa por ser hogar de varias tribus indígenas.
Las autoridades locales han tomado medidas de emergencia, desplegando servicios de rescate y helicópteros para inspeccionar los daños en zonas remotas propensas a deslizamientos de tierra. La presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, ha pedido a los militares que refuercen las misiones de rescate, mientras que el vicepresidente Lai Ching-te ha instado a la calma a la población.
El terremoto ha recordado a los taiwaneses la tragedia de 1999, cuando otro potente sismo causó numerosas víctimas y daños materiales. Dada la frecuencia de los terremotos en la región, las autoridades locales cuentan con sólidas medidas de emergencia.
Desde China, se ha ofrecido asistencia en casos de desastre. A pesar de la magnitud del terremoto, Taiwán ha demostrado estar preparado para hacer frente a este tipo de catástrofes naturales.
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