En una residencia en Plantation, Florida, se cometió un brutal asesinato que conmocionó a la comunidad. Jean Carlos Aponte atacó a su esposa, Sara Ashley Gama, de 38 años, con 28 puñaladas, y apuñaló a su hijo de dos años, Ethan, cuatro veces antes de lanzarlo a la piscina.
Fue el padre de Gama quien llamó al 911 al descubrir a su hija cubierta de sangre en la cocina y a Aponte inconsciente en el dormitorio. Gama presentaba múltiples heridas en el cuello, y Ethan fue hallado sin vida en la piscina del patio trasero, sumergido boca abajo.
La exesposa de Aponte reveló que durante su matrimonio, él mostró signos de violencia y control hacia ella. Las discusiones se volvieron violentas y la mujer sufrió abusos físicos que dejaron marcas en su cuerpo.
Ella también comentó que Aponte buscaba ayuda para tratar el trastorno de estrés postraumático al inicio de su relación. Este impactante caso de violencia familiar ha dejado a la comunidad devastada y a las autoridades en búsqueda de respuestas.
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