El impacto del cambio climático en los arrecifes de coral es alarmante y, según el enviado especial de las Naciones Unidas para los océanos, no se está haciendo lo suficiente para protegerlos. Peter Thomson sugiere que se incluyan todos los arrecifes importantes en áreas marinas protegidas bajo la iniciativa «30×30», con el objetivo de designar el 30% de las áreas del mundo como protegidas para 2030.
El blanqueamiento global de los arrecifes de coral está ocurriendo por cuarta vez, y se debe al calentamiento de los océanos causado por el cambio climático. Aunque se están tomando medidas para proteger los corales, la principal causa de su deterioro es la quema de combustibles fósiles, lo que genera emisiones de gases de efecto invernadero y calienta los océanos.
Thomson señala que algunos corales más resistentes podrían sobrevivir, pero advierte sobre la tragedia en el ecosistema que se avecina. Los arrecifes de coral son ecosistemas vitales que albergan una gran diversidad de especies marinas, protegen las costas de las tormentas y generan importantes ingresos económicos.
Para aumentar la protección de los arrecifes de coral, se propone incluirlos en la iniciativa «30×30» y extender las salvaguardas a las áreas marinas protegidas. Thomson destaca la importancia de un océano sano para un planeta saludable, y se compromete a seguir luchando por la preservación de los arrecifes de coral para las generaciones futuras.
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